Una colaboración entre más de 30 organizaciones aliadas locales, regionales e internacionales, aquellxs que viven en algunas de las regiones más afectadas del mundo se reunieron en el campamento de una semana para construir puentes de solidaridad a través de movimientos en el Sur Global, desarrollar estrategias colectivas para aumentar la conciencia global sobre la necesidad de un cambio sistémico y priorizar una transición interseccional que ponga el bienestar de las personas y el planeta antes que las ganancias de las corporaciones.







